El uso de animales en la investigación científica ha sido durante mucho tiempo objeto de acalorados debates. Por un lado, se considera moralmente incorrecto usar animales de esta manera únicamente para beneficio humano.
Por otro lado, eliminar completamente a los animales del laboratorio impediría nuestra comprensión de la salud y la enfermedad y, en consecuencia, afectaría el desarrollo de tratamientos nuevos y vitales. Aunque a veces estos estudios reducen la calidad de vida de estos animales, existen regulaciones exhaustivas para garantizar que se lleven a cabo de manera humanitaria.
Para ayudar a minimizar el daño que los animales pueden experimentar mientras se estudian en el laboratorio, los investigadores deben seguir un conjunto de principios, las «tres erres». Estos son:
- Sustituir: sustituir, cuando sea posible, los experimentos con animales por técnicas alternativas como el cultivo celular, la modelización por ordenador o los voluntarios humanos en lugar de animales.
- Reducar: Reducir el número de animales utilizados, mejorando las técnicas experimentales y compartiendo información con otros investigadores para que los mismos experimentos no sean realizados por muchas personas.
- Perfeccionar: Refinar la forma en que se cuida a los animales para ayudar a minimizar cualquier estrés o dolor, utilizando técnicas menos invasivas siempre que sea posible y mejorando la atención médica y las condiciones de vida.
A continuación puede encontrar muchos de los argumentos que se hacen a favor y en contra del uso de animales en el laboratorio, algunos que probablemente ya conozca y otros en los que quizás no haya pensado… ¿Qué te parece?
- ¿Son útiles los modelos animales?
- ¿Los aspectos positivos asociados con el uso de modelos animales superan a los negativos?
- ¿Son necesarios los experimentos con animales?
- ¿Es ético utilizar animales en la investigación?
- ¿Debería el uso de animales en la investigación ser una parte obligatoria de la ciencia progresista moderna?